La norma planea dar cabida a fórmulas de venta emergentes como los showrooms y limitar las promocionales en tiendas virtuales
La Dirección General de Comercio, dependiente de la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo que dirige Nuria Montes, ha comenzado los trabajos para actualizar la Ley de Comercio de la Comunitat Valenciana de 2011 y ajustarla a los requerimientos actuales de un sector en continua evolución. Unos ajustes entre los que se incluye una decisión en torno a un asunto tradicionalmente polémico como el de las Zonas de Gran Afluencia Turística (Zgat), que quedarán blindadas.
Estas áreas pasarán a tener “una vigencia indefinida”, únicamente teniendo la posibilidad de revocarse “si desaparecen las causas que motivaron la declaración”. Esta fórmula nació en el año 2013 con el objetivo de dinamizar el turismo en aquellas ciudades que cumplieran determinados requisitos como tener más de un millón de pernoctaciones al año.
Iniciativas
Sin embargo, esta no será la única propuesta, sino que hay otras iniciativas que, según defiende Comercio, se plantean “fruto del consenso alcanzado con todos los agentes del sector que demandaban una actualización de la norma vigente, que data de 2011”. El objetivo, según la directora general de Comercio, Maribel Sáez, es “atender a las peticiones que hemos recogido de todos los agentes implicados, algunas de ellas históricas, lo que sin duda cambiará el día a día del comercio valenciano y evitará conflictos innecesarios que se estaban dando.”
En concreto, la Dirección General ha trabajado para ajustar diversos aspectos de la ley referidos a cuestiones como horarios, venta no sedentaria, ventas promocionales, otras fórmulas de venta fuera de establecimientos comerciales permanentes o infracciones, entre otras modificaciones.
Además de este asunto, se pretende mejorar la definición de superficie comercial y recoger la obligación de que, en ningún caso, el ejercicio de la venta no sedentaria pueda dificultar la actividad y el acceso a locales comerciales y establecimientos públicos. Asimismo, se va a planear dar cabida a fórmulas de venta emergentes de tipo ocasional y fuera de establecimientos comerciales permanentes, como los showrooms o los pop up.
Con respecto a las ventas promocionales, se extenderán a las tiendas virtuales las actuales obligaciones de información de las tiendas físicas y, por otro lado, el plazo máximo de las ventas en liquidación pasará de 3 a 6 meses.